Hoy se juega el partido de ida por la semifinal de la Copa Libertadores. Dicen que no es revancha porque la Final en Madrid fue única, ¿pero no puede considerarse como una revancha?

Para el hincha de Boca esta oportunidad es única que definen todo en La Bombonera. Si el partido por el torneo es un reflejo de qué esperar, no van a haber grandes diferencias de lo planteado por Boca en éste partido en relación a lo que vimos hace poco.

No tiene que ser sorpresa tampoco: los equipos dirigidos por Gustavo Alfaro siempre se caracterizaron por el orden defensivo y apostar a alguna contra o un gol de pelota parada. Algo que sabe explotar muy bien y que le salía seguido cuando dirigía a Arsenal de Sarandí.

Por el lado de River, ¿qué se puede decir que ya no se haya dicho de Gallardo? Sabe muy bien cómo plantear las series. Polémica aparte, ha demostrado una y otra vez sus cualidades como Director Técnico y experiencia de sobra para plantear a sus equipos en todas las competencias internacionales.

El partido de hoy se juega en El Monumental y ayer hubo un fuerte diluvio, por lo que se espera una cancha rápida. El árbitro será el brasileño Raphael Claus, uno internacional pero sin mucha experiencia para un encuentro de ésta magnitud. Para un árbitro un partido así puede consagrarlo en su carrera como internacional o enterrarlo, dependiendo de cómo salga su encuentro. Será fundamental para Él marcar su prescencia en los primeros 15 minutos del encuentro, cuando las tensiones más altas están y después es más llevadero el partido a arrancar desapercibido y después querer torcer el rumbo del partido.