El Sábado Diego Armando Maradona hubiese cumplido 61 años. Se me vienen a la cabeza recuerdos, como después de México ’86 estar jugando al fútbol y querer emular aquel GOL DEL SIGLO con los ingleses, más adelante en el tiempo lo que fue Italia ’90 con el partido histórico con Brasil, el himno contra Italia y la Final con Alemania.

Como hincha de Argentinos Juniors, el momento de mayor dolor fue su regreso a Boca cuando le gritó un gol de penal al Club y, en su partido despedida en La Bombonera, no nombró al Club. Me sentí dolido y a la vez entendía su enojo por el mal manejo del Club por parte de los dirigentes después que se fue de Argentina, en lo que había sido una transferencia récord en lo económico. Pero el tiempo sana heridas y queda en el recuerdo su última visita en La Bombonera:

En el Estadio Diego Armando Maradona de Buenos Aires se le rendirá un especial homenaje donde jugarán varios ex jugadores de la Selección Argentina contra los jugadores de su infancia, Los Cebollitas.

Hay mucha gente que confunde lo que fue Maradona afuera de la cancha con las cosas que hizo adentro de la misma, que en todo caso era algo personal de Él. También hay que decir que una cosa es como se muestra públicamente y otra en forma privada, donde no mucha gente lo pudo tratar. En mi caso, un primo mío se lo cruzó en el mismo avión en el Mundial del 2018 y me contó que se quedó charlando con Él casi 10 minutos, como una persona más. Cualquier chico criado o de Argentina en la década del ’80 soñaba con ser Él, con tirar una gambeta o un zurdazo al ángulo. Por eso verlo en sus últimos años, donde subían videos de Maradona estando ebrio personalmente me producía tristeza, en lugar de reírme de verlo así. Da tristeza de que tuvo que fallecer para que todos se acuerden de los buenos momentos del Diego y no de las cosas que hizo afuera de la cancha, que en todo caso fueron problemas personales de Él y del entorno que no lo ayudó.

El Sábado será un día muy especial para recordar la magia del Diego, las cosas únicas que hizo y que seguramente a varios que nos criamos viéndolo jugar nos derramará unas lágrimas al recordar cosas de nuestra infancia, porque todos alguna vez soñamos con «ser Maradona».

Para siempre quedará en mi memoria la última visita del Diego a La Paternal, cantando «La Paternal» junto a los hinchas de Argentinos Juniors.

¡Feliz cumple Diego!